La teología es un ministerio y las opciones que en ella se hagan determinan el camino de evangelización que cada uno elige.
Es una experiencia insustituible compartir la fe a partir de una realidad, de las situaciones de marginalidad y sufrimiento, de las esperanzas siempre postergadas.
Según la lectura que el cristiano haga del evangelio, encontrará a Cristo que pasó haciendo el bien a todos, uniéndose a los niños, a los enfermos, a los desposeídos y también luchó por la justicia, para que los débiles no fueran los esclavos de los fuertes.
La enseñanza de Cristo, es que el Reino le pertenece al Padre y lo que regala a los hombres para que no tengan que esforzarse en conseguirlo. Una de las bienaventuranzas es una alabanza a los pobres de espíritu porque a ellos les pertenece el reino de los cielos.