Cada uno de los cuatro evangelistas nos da una visión completa de toda la realidad cristiana, desde el ángulo y problemática de cada autor. Por eso es preciso seguir el texto, exponer lisa y llanamente el contenido de cada evangelio, estudiado desde dentro del mismo libro y sin dejarse llevar por construcciones sistemáticas apriorísticas. Los evangelios los han escrito los evangelistas. Es necesario aceptarlos como son: con su ritmo interno, con sus avances y repeticiones, con su dinámica propia y distintiva. En ese avance, en la estructura general de cada obra literaria, se puede descubrir un poderoso pensamiento, un gran mensaje. Es eso lo que recogen estas páginas.
Esta obra es, por lo tanto, primeramente bíblica. Importa comprender el viejo texto de los evangelios. Pero hay que entenderlo en su realidad de evangelio, de buena nueva de Jesús, y no tan sólo en su prehistoria o en sus simples formas literarias.
Por eso esta obra también quiere ser cristiana. Quiere que Jesús hable en nuestro mundo; quiere hacer que tantos hombres que edifican su vida sobre sistemas más o menos atrayentes puedan quizá encontrarse con el Jesús del evangelio.

I. Teología de Marcos: Francisco de la Calle p. 15 -- II. Teología de Mateo: Javier Pikaza p. 109 -- III. Teología de Lucas: Javier Pikaza p. 219 -- IV. Teología del Cuarto Evangelio: Francisco de la Calle p. 357.